¿Qué tipos de avales existen?
Así, cuando sea necesario reforzar la garantía de un préstamo hipotecario, se pueden ofrecer dos clases de avales, cuyas diferencias debes conocer antes de apostar por uno y otro:
- De garantía personal.
- De garantía real.
En caso de impago, las consecuencias para los fiadores son ciertamente diferentes.
Avales con garantía personal
El avalista responde de forma personal ante el impago de su avalado. Es decir, abonará completamente su deuda con todos sus bienes presentes y futuros.
Adicionalmente, esa persona se verá muy limitada para endeudarse. A efectos prácticos y en los estudios financieros, esa hipoteca pendiente de pago también le será asignada. Sus obligaciones son
prácticamente las mismas que las del titular del préstamo que ha avalado, sobre todo cuando la firma se realiza bajo la modalidad de figura solidaria. El avalista es, a todos los efectos, tan deudor
como el prestatario original.
Avales con garantía real
En esta situación, el prestatario o un avalista aporta un bien tangible (habitualmente un inmueble), aceptado por el banco, como garantía adicional de pago. En caso de impago de la hipoteca, el bien
hipotecado como garantía adicional responderá de la deuda pendiente.
