Enfermedades articulares

0

¿Cómo tratarlas cuando aparecen?

El deterioro de las articulaciones

Es habitual que cuando se envejece, aparezcan los conocidos problemas en las articulaciones tales como rigidez o falta de flexibilidad. A menudo ocurren por una pérdida del líquido sinovial, un fluido que se encuentra en el interior de la articulación y que tiene la función de lubricar la articulación, reduciendo la fricción entre los cartílagos y demás tejidos de la misma. Ayudando también a prevenir su desgaste.

Otro problema común es la calcificación de las articulaciones al depositarse en ellas los minerales, algo habitual en la articulación del hombro, la cadera, rodillas o dedos. El desgaste de la articulación y su degeneración son consecuencia de la pérdida del cartílago.

Lista de enfermedades articulares

No siempre el dolor o los problemas articulares son producidos por un deterioro de la articulación propio del proceso de envejecimiento. En ocasiones estos problemas son derivados de otras enfermedades que pueden estar afectando también a las articulaciones. Las más habituales son:

  • Artritis. Se conoce con este nombre a la inflamación de la articulación. Estas se hinchan, produciendo dolor y molestias. Cuando una articulación se ve afectada por la artritis, se pierde la movilidad y puede incluso deformarse. Los tipos más frecuentes de artritis son la artrosis y la artritis reumatoide.
  • Sarcomas sinoviales. Es un tumor maligno de los tejidos blandos que representa un 8% de los tumores en estos tejidos. Se entiende por tejidos blandos a los ligamentos, nervios, músculos, tendones y otros tejidos próximos a la articulación.
  • Fiebre reumática. Es una enfermedad inflamatoria que se produce después de una infección por las bacterias estreptococos del grupo A. Sus efectos pueden ser graves y afectar al corazón y a las articulaciones.
  • Bursitis. Se trata de la inflamación de las bolsas de líquido que se encuentran en las articulaciones para evitar la fricción al producirse el movimiento de la misma. Suelen presentarse en aquellas articulaciones con movimientos más repetitivos como los hombros, codos, caderas, muñecas, rodillas, etc.
  • Necrosis aséptica. Se trata de una enfermedad donde se pierde, de manera temporal o permanente, el flujo sanguíneo al interior de los huesos. Como consecuencia de esta pérdida de riego sanguíneo el tejido óseo muere. Si este proceso se produce cerca de una articulación, puede desencadenar en el colapso de la propia articulación.
  • Artropatía neurogénnica. Es una enfermedad de los nervios de la articulación donde estos se ven afectados de manera que no se percibe el dolor articular. Esto conlleva a que las lesiones leves o pequeñas fracturas pasen desapercibidas, produciendo un desgaste y una destrucción constante de la articulación, fruto del deterioro acumulado en ella.

Enfermedades articulares. Cómo prevenirlas

En cualquier caso, es necesario adoptar ciertas prácticas que favorezcan la protección y preservación de las articulaciones, de manera que se puedan prevenir estas enfermedades o no agravar los síntomas en caso de ya padecer alguna de ellas.

Algunas recomendaciones de los expertos son las siguientes:

  • Levantarse con cuidado después de estar mucho rato sentado, de manera que no recaiga de manera brusca y precipitada todo el peso corporal sobre las rodillas. Se aconseja hacer pequeños movimientos previos en las rodillas y tobillos para preparar las articulaciones.
  • Estirar las piernas a menudo cuando se permanece sentado durante un largo período de tiempo, para evitar que la rótula de la rodilla ejerza demasiada presión sobre el fémur.
  • Cuando se está en una misma postura moviendo con suavidad las articulaciones para prevenir el dolor articular.
  • El tipo de calzado es muy importante. Un calzado que sujete firmemente el pie pero sin que ejerza una presión intensa sobre el pie, que sea cerrado, y sin tacón.
  • No cargar demasiado peso a la vez y repartir la carga entre ambos lados del cuerpo para no sobrecargar las rodillas. Bajar de peso en el caso de tener sobrepeso también es aconsejable para reducir la presión ejercida sobre esta articulación.
  • Subir y bajar las escaleras despacio y sujetándose a la barandilla, con cuidado de apoyar completamente el pie antes de subir al siguiente escalón.

¿Qué enfermedades articulares existen?

En ocasiones estos problemas son derivados de otras enfermedades que pueden estar afectando también a las articulaciones. Las más habituales son:

Cómo prevenir las enfermedades articulares

Algunas recomendaciones de los expertos son levantarse con cuidado después de estar mucho rato sentado,estirar las piernas a menudo…

Cómo se produce el deterioro de las articulaciones

Es habitual que el proceso de envejecimiento vaya acompañado de problemas relacionados con las articulaciones, como puede ser la rigidez o la falta de flexibilidad. Normalmente ocurre por una pérdida del líquido sinovial, o por la calcificación de las articulaciones al depositarse en ellas el exceso de minerales